Los 10 errores más habituales al apostar que debes evitar

Escrito por Pau Sisternas

Actualizado: 22/10/2024

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Nadie dijo que apostar fuese fácil, y muchas veces cometemos pequeños errores que nos acaban perjudicando. Es fácil que conozcas algunos de los fallos más habituales de los apostantes, como también es posible que te sientas identificado con algunos de ellos. Lo que en principio te parecía una buena idea puede que no lo sea tanto, así que vamos a conocer los 10 errores más habituales al apostar, de modo que puedas corregirlos y corregir tu estrategia de apuestas y orientarla hacia el verde.

Todos tenemos unos colores. Somos de un equipo, seguimos a un tenista o piloto y apostamos a su favor. Pero como bien sabrás hay que apostar con la cabeza, no con el corazón que nos puede jugar malas pasadas. Quizá tú confíes en tu equipo, pero es una visión distorsionada de la realidad, influenciada por tus colores y por una prensa que le puede ser afín. La mejor solución al problema es no apostar cuando juegue tu equipo. Así solo tendrás que ocuparte de animar, sin preocuparte por si tu apuesta sale o no.

Las apuestas combinadas tienen sus defensores y sus detractores. Está claro que cuantas más selecciones haya, más probabilidades tenemos de fallar pero introducir la misma selección en dos o más combinadas diferentes es jugar a la ruleta rusa. Por muy segura que parezca, puede fallar y si falla la selección has perdido las dos apuestas. Quizá te sirva una semana, pero a medio plazo no es sostenible. La solución, no repetir nunca selecciones en tus combinadas.

Barça o Real Madrid, Rafa Nadal, Marc Márquez, Lewis Hamilton... son sinónimo de victoria, pero de vez en cuando también fallan. Los favoritos ganan siempre, aunque algunos apostantes así lo crean así que habrá que analizar bien la apuesta y todo lo que pueda influir en ella. Apostar por el favorito no siempre es una apuesta segura, y siempre puede surgir un underdog que nos arruine la apuesta. Por eso, nunca apostaremos al favorito solo porque es el favorito.

Otro error bastante común cuando hacemos apuestas combinadas es incluir muchas selecciones a cuota muy baja. Está claro que cuanto menor sea la cuota, más probabilidades de éxito tiene la apuesta pero tienen muy poco valor y no podemos pasar por alto que cuantas más selecciones se incluyan, más fácil es que falle una y perdamos la combinada. En este caso, lo que deberíamos hacer es buscar el equilibrio entre cuotas, valor y número de selecciones para reducir riesgos.

Es algo más habitual en apuestas físicas que online, donde la influencia del entorno hace que cambiemos de opinión en el último minuto y apostemos por lo contrario de lo que teníamos pensado. Como bien sabrás, la clave para que salga una apuesta es pensarla bien y analizarla a fondo, algo que evidentemente no hacemos si cambiamos de opinión a última hora. Por eso, si no lo tienes claro al 100%, no apuestes. Siempre es mejor arrepentirse de no apostar que arrepentirse de cambiar la apuesta a última hora por un pálpito o por influencias externas.

Una de las claves para un buen análisis de la apuesta es estar bien informado. Sin embargo, muchos jugadores basan sus apuestas en informaciones procedentes de medios o periodistas de dudosa credibilidad. Puede parecer que están cerca del club o de un deportista, pero no son más que vendedores de humo que han hecho de las fake news su modo de vida. Por eso, ante exclusivas de lesiones, conflictos internos o traspasos siempre es mejor dudar y contrastar la información en medios serios.

Habitualmente nos encontramos con interesantes promociones que bonifican combinadas o nos ofrecen un seguro, promociones con apuestas gratis si se da una situación concreta, etc. Pero las promociones tienen una letra pequeña, y nunca deberíamos utilizar una promoción sin leer los términos y condiciones -y comprenderlos-. Luego vienen los lamentos porque la apuesta no cumple algún requisito y nos quedamos sin premio. Siempre hay que leer la letra pequeña.

Seguramente sea el error más grave de todos, ya que estás comprometiendo tu bank. Aumentar el stake para recuperar pérdidas nos llevará a la bancarrota, especialmente si estamos inmersos en una mala racha, y que puede derivar en serios problemas personales o en deudas de juego. Es una estrategia irresponsable, incluso cuando nos hemos marcado un stop loss o límite de pérdidas. Por eso, si estamos en una mala racha reduciremos el stake o incluso dejaremos de jugar un tiempo.

Las apuestas también funcionan por rachas, pero no deberías seguir apostando si estás pasando por un bache. Como decíamos en el punto anterior, apostar sin límite puede derivar en problemas económicos y personales muy serios, y si estamos jugando es para divertirnos y nada más. Por eso, es necesario fijarnos un límite y dejar de apostar cuando lleguemos a él. En la propia casa de apuestas puedes decidir cuánto dinero puedes depositar mensualmente, así que no superes ese límite ni siquiera apostando en otras casas de apuestas o en locales físicos.

Para hacer ese buen análisis de la apuesta, controlar el bank y jugar la cantidad adecuada en cada apuesta es imprescindible para mantener nuestras facultades plenamente operativas. Por eso, apostar bajo los efectos del alcohol, las drogas o la medicación es peligroso ya que podemos percibir una realidad distorsionada que acabará afectando negativamente a nuestras apuestas. Lo mismo pasa si apostamos con problemas personales. Para apostar hay que tener los 5 sentidos alerta y la cabeza en su sitio.