Las primeras slots de la historia
Hoy quiero continuar (y finalizar) la entrada que había comenzado hace poco más de un mes donde os había hablado de las primeras slots o tragaperras, como la Liberty Bell. Fue un dispositivo inventado en por Charles Fey en el año 1887 que en su origen no daba dinero y cuyo funcionamiento era bastante rudimentario, pero que tuvo mucho éxito en aquel entonces.
Su evolución no tardó demasiado en llegar, en 1891. Su nombre era Poker Machine, y fue inventada por el propio Fey. En esta nueva versión no daba dinero como premio sino cigarrillos y bebidas y se solían colocar en los bares. Su maquinaria constaba de cinco rodillos con 50 cartas de póker y los premios salían cuando a los jugadores les venían buenas manos.
Debido al éxito de estas máquinas, no tardó en aparecer la competencia y en 1907, un conocido empresario de Chicago llamado Herbert Mills comenzó a fabricar la Operator Bell, con un mecanismo similar al de la Liberty Bell y todos los bares tenían una o más para sus negocios, porque les reportaban bastantes beneficios.
Las frutas símbolo de las slots
Aquella máquina tenía dos versiones, una que daba cigarrillos y bebidas como premio y otra que daba chicles. Esta última contaba con varios rodillos con frutas dibujadas para enseñarle al cliente el sabor de chicle que le correspondía. Desde aquel momento, las frutas pasaron a ser uno de los iconos de las slots en todo el mundo, algo que sigue muy presente en nuestros días.
Tendrían que pasar nada menos que 56 años para que apareciese la primera de las slots electrónicas. Fue en el año 1963 y se llamaba Money Honey, inventada por la conocida empresa Bally Technologies. En aquel entonces el máximo premio que se podía pagar era de 500 monedas, siendo toda una fortuna si se compara con aquellas antiguas máquinas y muy poco comparado con los premios que pueden llegar a dar hoy en día las slots online.